En un año atípico donde nos hemos visto embargados por la gran dificultad de una pandemia a nivel mundial, un tiempo donde a primado el distanciamiento físico acompañado de varias restricciones sociales y adaptaciones a un nuevo entorno, las fechas donde el encuentro familiar es una constante nos trae a la menta las dificultades que a día de hoy enfrentamos.
Así el cristianismo con 2.500 millones de creyentes que suponen el 33% de la población mundial, celebran la Navidad que junto con la Semana Santa, son de las festividades más importantes. Aunque hay variaciones: mientras protestantes y católicos la celebran el 25 de diciembre, esta fecha cambia en los países de tradición ortodoxa: Rusia, Serbia y Ucrania, entre otros.
En Sudamérica, la Navidad es también de carácter festivo y obligatorio; en estos países, al igual que en los europeos, la Navidad se celebra unida a tradiciones muy arraigadas y de gran calado social, como los Reyes Magos o Santa Claus, las comidas típicas de Nochebuena o del día siguiente a Navidad.
El clima de "familiaridad" que se extrae de estas fechas es una constante durante todo el año, más no todos tienen la posibilidad de disfrutar o gozar de estas fechas como desearían, de manera contraria a lo que se anhela en estas fechas (Navidad - Fin de año) pasan a ser momentos difíciles para quienes por una u otra razón no tiene un núcleo familiar con quienes compartir, a quiénes estas fechas recuerdan momentos complejos de años pasados o simplemente porque no a todos se les da bien sentir lo que "se debería" en estos momentos, además de la presión socio-económica en las cuales muchas personas y familias pueden llegar a sentir al no alcanzar los "status" de sus pares.
Como tal, se genera una gama de emociones que generan malestar en el ser humano, pudiendo entender que la Navidad es una época del año en que la gente puede deprimirse más. Época en que aparecen más sentimientos de soledad, estrés, la ansiedad, etc. Todos estos síntomas que en años anteriores ya se encontraban presentes en la población podrían cronificarse o ser más evidentes en relación a la situación mundial que atravesamos (sumando las perdidas materiales y personales que nos ha dejado este año)
Por ese motivo como miembro de Sepaced y en conjunto con un grupo de trabajo se propuso una actividad online que abarcara la posibilidad de acogida a quienes por alguna razón desearan un tercero con quién compartir estos momentos complejos, abrir una ventana de acompañamiento a todo aquel que necesitara del apoyo profesional y de pares para poder conceptualizar de mejor manera esta época y de igual forma cerrarla de forma óptima.
La actividad se llevo acabo el miércoles 23 de Diciembre, como programa piloto y busca en un futuro incluir a un grupo mayor de personas que necesiten de espacios conjuntos para "celebrar" de igual manera estas fechas; nuestro compromiso es brindar estos espacios para la comunidad en general y hacer de estos momentos difíciles, un camino más ameno para transitar.
Que estas fechas sean un recordatorio de lo efímero del tiempo y podamos aprovechar al máximo con quienes nos rodean, unas felices fiestas y que el año venidero sea el mejor.